Tuesday, October 19, 2010

La Promesa en medio de la Aflicción


¨Aunque afligido yo y necesitado, Jehová pensará en mí: Mi ayuda y mi libertador eres tú; Dios mío, no te tardes.¨ Salmos 40:17

Este fue el último versículo que mi papa compartió en su muro de facebook para todos sus amigos unas horas antes de que sufriera un infarto cerebral. Ninguno de nosotros nos imaginábamos lo que iba a pasar a la mañana siguiente, pero mi padre tenía una promesa de parte de Dios asegurándole que a pesar de que tuviera que padecer necesidad o aflicción, Dios está pensando en él. Muchas personas a veces cometemos el error de pensar que porque somos cristianos nunca nos van a pasar cosas malas, pero Jesús nos dijo lo contrario: ¨En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al mundo.¨ Van a llegar momentos en nuestras vidas que serán muy difíciles de atravesar y pasaremos diversos tipos de aflicciones, pero la diferencia está en que no estamos solos, sino que Jesús ha prometido ayudarnos a atravesar esas aflicciones y vencerlas junto a Él. Mi padre lleva dos semanas internado en la clínica y recién hoy lo sacaron de terapia intensiva y lo bajaron a sala para que la familia lo pueda ayudar con la rehabilitación. Está progresando muy bien y hemos visto la mano de Dios tomando el control y sanando su cuerpo, y estoy seguro que si no fuera por la protección divina de Dios no lo tendríamos junto a nosotros en este momento. Todavía queda un camino por recorrer, pero a pesar de que mi papa está atravesando necesidad y aflicción él cuenta con la promesa de Dios: Él es su ayuda y libertador y no tardará. La misma promesa que nos mantiene a nosotros, su familia, confiados y seguros.

David conocía muy bien el significado de aflicción y necesidad ya que antes de ser Rey de Israel tuvo que vivir escondido en cuevas para salvarse del Rey Saúl que lo buscaba para quitarle la vida. David atravesó muchos momentos difíciles en su vida, pero su relación con Dios era tal que podía vivir confiado en medio de la prueba sabiendo que Dios era su libertador y salvador. El escritor de la mayoría de estos Salmos escribía sobre esto porque era lo que estaba atravesando y sabía que lo único que lo mantenía confiado era que Dios estaba en control de su vida y tenía un propósito. La aflicción sería pasajera y la promesa se cumpliría en su vida. Lo bueno es que David sabía que no tendría que atravesar esa aflicción solo, sino que tenia a Jehová de los ejércitos de su lado. Ese mismo Dios que estuvo con David en medio de su aflicción es el que promete estar a nuestro lado cuando atravesamos dificultades. No le preguntemos a Dios porque nos suceden las cosas, sino preguntémosle para que suceden y aprendamos a confiar.

Así como para David como para mi padre, lo bueno es que en medio de toda la aflicción y necesidad Dios está ahí para ayudarnos a atravesar los problemas. Dios es el que nos da esa paz que no podemos describir que nos cubre cuando atravesamos momentos difíciles y duros. Él es el que piensa en nosotros en medio de la prueba y nos ayuda a atravesar esos momentos que quizá nunca podríamos atravesar solos. Él es el que nos llena de esperanzas cuando no parece haber una salida y el que nos aumenta nuestra fe. Ahora mientras me encuentro al lado de mi papa y veo la aflicción por la cual está atravesando tengo paz y certeza de que Dios está en control de su vida y está pensando en el. Él es el único que puede apresurar los tiempos para socorrerlo y es el único que nos puede dar a nosotros la paz y tranquilidad necesaria para apoyarlo en este tiempo y saber que Su propósito y Sus promesas se cumplirán en su vida como lo han estado haciendo a través de todos estos años. La paz que Dios nos ha dado en medio de esta situación es indescriptible.

¨En paz me acostare y así mismo dormiré, porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado.¨ Salmos 4:8

Friday, October 1, 2010

El Significado de la Navidad


¨Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.¨ Mateo 1:21

Muchas personas celebran la Navidad sin conocer su verdadero significado o sin prestarle mucha atención al mejor regalo que la humanidad pudo haber recibido. Dios nos envío a Su hijo unigénito para que podamos disfrutar de una relación con Él mediante el sacrificio que pago Jesús en la cruz por nosotros. Mateo es el primer libro del Nuevo Testamento que le siguió a los más de cuatrocientos años de silencio en los registros bíblicos. Mateo fue un recaudador de impuestos judío que entendió perfectamente quien era realmente Jesús. El conocía profundamente las escrituras y hace un cuidadoso repaso demostrando como el nacimiento de Jesús cumplió varias de las profecías, las cuales algunas  habían sido escritas mil años antes. Mateo comienza por describir la genealogía de Jesús comenzando desde Abraham hasta David y luego finalmente llegando al nacimiento de Jesús demostrando como el Mesías venía del linaje de David y por lo tanto se cumplía la promesa de Dios de que la casa de David reinaría hasta el fin. Jesús era el Mesías y venía a establecer su reino eterno.

Mateo describe cuidadosamente como Jesús vino a cumplir con cada una de las profecías, para que los judíos entendieran que Él era el Mesías que habían estado esperando por tantos años. Primero nos señala como la profecía en Isaías 7:14 se cumplió ya que Jesús nació de una virgen. Además Mateo nos muestra que Jesús nació en Belén como lo profetizó Miqueas (Miqueas 5:2) setecientos años antes, luego nos señala como José tuvo que llevar a María a Egipto para salvarle la vida al niño para que se cumpla lo que dijo el profeta Oseas (Oseas 11:1) cuando dijo que De Egipto Dios llamó a Su hijo. Estos son solo un par de ejemplos de las profecías que se cumplieron ya que además se cumplió la profecía de Jeremías sobre la orden que dio Herodes para matar a los niños. Luego continúa explicando como Jesús llegó a habitar en Nazaret confirmando lo que decían los profetas acerca del Mesías que sería llamado el nazareno. Mateo nos relata además que Juan el Bautista era aquel que Isaías decía que iba a preparar el camino para Jesús. Mateo explica cada uno de estos eventos para que no quedaran dudas de que Jesús era el verdadero Mesías. Muchas más profecías se fueron cumpliendo a medida que Jesús comenzó su ministerio y Mateo fue muy claro en señalarlos.

Muchos de nosotros podemos recordar como ansiábamos desde niños pequeños por la llegada de la navidad. Queríamos que llegue ese tan ansiado día para poder pasar con nuestra familia comiendo comida rica, viendo los fuegos artificiales, y poder finalmente abrir los regalos debajo del arbolito. Entre tanta ansiedad muchos nos olvidamos el verdadero significado de la navidad, el nacimiento de nuestro Mesías, aquel que se despojo a sí mismo y vino a morir en la cruz por nuestros pecados en condición de hombre. El regalo más grande ya nos fue dado, solo hace falta abrirlo, aceptarlo, y recibirlo. El libro de Mateo es una muestra clara de que Jesús realmente fue el Mesías y que él vino para establecer un reino eterno de gozo, paz, y justicia. No olvidemos este regalo tan grande que nos ha sido dado sin merecerlo. Jesús no es como Santa Claus que dice que para recibir el regalo tienes que haber sido un chico bueno, Jesús nos ha dado este regalo a pesar de nuestras falencias y pecados. Lo único que tenemos que hacer es estar dispuesto a recibirlo. La próxima Navidad recordemos el motivo por el cual celebramos esta fecha tan importante: El nacimiento de nuestro Salvador y Mesías.