Thursday, April 15, 2010

La Niña de Sus Ojos


¨Guárdame como a la niña de tus ojos; escóndeme bajo la sombra de tus alas.¨ Salmos 17:8

David tenía una relación muy especial con Dios y fue el autor de la mayoría de los Salmos que conocemos hoy en día porque realmente pasaba tiempo de intimidad con su Padre. Dice la Biblia que David fue el Rey con el corazón más perfecto para con Dios y todos los demás reyes de la historia de Israel fueron comparados siempre con él, ninguno superándolo, ya que la Biblia dice que no hubo otro rey como David. Siempre que había un rey bueno, en el libro de Crónicas lo comparaban con el corazón de David, y cuando era un rey malo lo contrastaban con el corazón de David. Todos conocemos que David cometió un grave error durante su reinado cuando tomo a Betsabé por mujer y mando a matar a su marido Urias. Pero a pesar de ese error Dios dice que David tuvo un corazón perfecto para con El, porque realmente fue perdonado y su pasado olvidado.

Quizá David no fue perfecto, pero su relación con Dios y su corazón hacia el sí lo fue. Esto me recuerda a una escena de En Busca del Destino donde un psicólogo (Robin Williams) le da unos consejos sobre el amor a su paciente (Matt Damon) y le dice: ¨No sos perfecto compañero, y déjame sacarte el suspenso, esta chica que conociste, ella tampoco es perfecta. Pero la pregunta es si son perfectos el uno para el otro.¨ A diferencia de esta frase, Dios si es perfecto, nosotros no lo somos, pero la relación que podamos tener para con Dios puede llegar a ser una relación perfecta porque El borra nuestro pasado oscuro y quiere enseñarnos a vivir en intimidad con El, viviendo una vida llena de amor, paz, y gozo. Al igual que David, nosotros también podemos vivir con un corazón perfecto, renovado y entregado a Dios.

David escribe el Salmos 17 en un momento donde se siente perseguido por sus enemigos. La situación en la que se encontraba no era fácil y temía perder su vida. Y es en ese instante que clama a Dios y le pide que lo guarde como la niña de sus ojos. David sabia que la relación que tenia con Dios era especial y que El lo veía como nosotros vemos a la niña de nuestros ojos. No estoy hablando de cualquier amor, sino de aquella persona a la que realmente amamos y daríamos lo que fuera por estar con ella. Si nosotros, siendo pecadores haríamos lo que fuera por esa otra persona, cuanto más Dios siendo perfecto nos guardaría en los momentos de mayor dificultad de nuestra vida. El Dios de David era poderoso para librarlo a él, la niña de sus ojos, de cualquier situación y eso le daba paz para enfrentar la adversidad. David sabia que contaba con la protección divina de Dios porque vivía una relación intima con El y entendía el perfecto amor de Dios hacia él. Nosotros también podemos contar con esta protección y amor divino, solo tenemos que confiar y saber que Dios nos guarda como a la niña de sus ojos. No importa la adversidad o los problemas por los que estemos pasando, podemos tener la garantia de que Dios nos esta cuidando y que El esta en control de nuestras vidas porque el nos guarda como la niña de sus ojos y quiere lo mejor para nosotros.

¨Mis ojos siempre se dirigen hacia Jehová, porque el saca mis pies de la red.¨ Salmos 25:15

¨Hablad al corazón, decidle a voces que su tiempo es ya cumplido, que su pecado esta perdonado, que doble ha recibido de la mano de Jehová por todos sus pecados.¨ Isaías 40:2

No comments:

Post a Comment